Se acabó, de nuevo a empezar...
Hace un rato, tras unos días de pequeñas manchitas al limpiarme, he empezado a manchar de regla. La diferencia es que me duele, física y emocionalmente. Ya era lo que faltaba: un microaborto.
No tengo muchas ganas de hablar, ni de escribir, ni de absolutamente nada. Me da la sensación de que nunca va a salir el sol. No puedo evitar sentirme mal cuando veo la cara de desilusión de David. Necesito hacerle feliz de una vez. Es tan bueno, tan especial, que no merece sufrir tanto.
Por mi parte, después de la marcha de Joel, es difícil comparar cualquier otra situación. Me siento peor por mi gente que por mi misma. Odio sentir fuerza en este momento, cuando lo único que quiero es dejarme caer y dejar de desear algo que no parece ser para mi.
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3 comentarios:
hola guapisima!!! hace tiempo leí tu blog y la verdad no recuerdo si comenté.Siento mucho la perdida de JOel,eres muuuy fuerte. Pero no vengo aqui a recordarte eso,solo decirte que algun dia verás el sol claro q si, igual q tienes a tu niño mayor contigo ,dentro de unos meses tendrás otro u otra. Ya lo verás, ten fé cariño.Muchos besosssssssss y aqui tienes una nueva lectora k viene a darte luz, fuerza, apoyo y cariño.
patri siento mucho leer estas palabras,despues de la conversacion de esta mañana..animo eres una mujer muy fuerte,y seguro que dentro de poco lo conseguiras...como te dije aunque estemos a muchos km cualquier soba aqui estamos....muchos besos
No me lo puedo creer, Paty, cariño! ve al médico, que te miren porque a lo mejor no es un microaborto, yo manché como una regla y mi chiquitín siguió conmigo dos semanas más! la sangre en ocasiones no significa pérdida. Espero de corazón que salga bien, cariño, te lo mereces tanto!
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